IDA Y VUELTA

Me sentía peligrosamente libre. En un vuelo impensado inicié una peregrinación fantasma. Buscaba extraños dioses primigenios que velaran mi sueño lejos de mi propio suelo. Agité, sin descanso, las compuertas del viento cósmico esperando una respuesta. Navegué escuchando el ruido planetario.  Me elevé aún más para habitar otros sitios pero hallé un no lugar. Vi algunos jardines exóticos y sin confines. Nada más.

Montado en mis propias vibraciones y con los puños apretados regreso de un viaje infecundo. Abro una mano y sólo encuentro una pizca de polvo y los pétalos de una flor..